Aunque han pasado casi cinco años desde el inicio de la pandemia de Covid-19, es indudable su importancia histórica: por ejemplo, aún en 2024 la educación virtual sigue en auge. A pesar de que el aprendizaje online existía antes de la pandemia, fue durante esta época que se incrementó su popularidad; de hecho, Coursera registró 20 millones de usuarios nuevos en 2021, mostrando un notable incremento de estudiantes.
Este salto de modelo educativo llevó a todo el mundo de pasar horas en un salón de clase a aprender a través de una conferencia web; y por supuesto, con este cambio, también vinieron nuevos retos.
Uno de los retos más grandes para la educación virtual está en asegurar que cada persona pueda empezar una formación de calidad, y además de esto, culminarla con éxito. Por esto existen diferentes modalidades que se puedan ajustar a las necesidades de la población; dentro de estas encontramos la educación sincrónica y asincrónica.
Entender las características y ventajas de cada una es fundamental para tomar una decisión acertada a la hora de escoger un curso, bootcamp, taller u otro tipo de formación. Te explicamos todo lo que necesitas saber.
¿Qué es la educación sincrónica?
La educación sincrónica se refiere a la enseñanza en tiempo real, en donde los alumnos aprenden e interactúan en vivo con su profesor y compañeros. El aprendizaje de todo el grupo se da al mismo tiempo, y por lo tanto, requiere de su presencia mientras se está dando la clase.
Este tipo de formación está presente en un entorno físico, como un salón de clases, o en un entorno virtual como un webinar o una videoconferencia, además dentro de este espacio se puede dar lugar a actividades grupales como debates o conferencias.
Dentro de las principales ventajas de la educación sincrónica podemos encontrar la posibilidad de resolver dudas en el momento, la interacción directa entre los estudiantes y la experiencia y estructura similar a una clase presencial.
¿Qué es la educación asincrónica?
En el caso de la educación asincrónica vemos una forma de impartir clases totalmente diferente, pues en este caso no se requiere la presencia de los estudiantes al mismo tiempo, y el contenido educativo está disponible para que cada persona aprenda a su ritmo.
En este caso se utilizan herramientas como vídeos pregrabados, lecturas, foros de discusión o podcasts que son proporcionados por el profesor.
La educación asincrónica tiene grandes ventajas, como por ejemplo una flexibilidad completa para estudiar en cualquier momento y lugar, un ritmo de aprendizaje personalizado y acceso a material descargable.
Diferencias entre la educación sincrónica y asincrónica
Aunque la formación académica virtual empezó bajo un modelo asincrónico, los avances en la tecnología y la facilidad de comunicarnos han permitido que se pueda impartir clase virtual de forma sincrónica; sin embargo existen ciertas diferencias clave entre las dos:
- La forma de interacción en la educación sincrónica es directa y en tiempo real, mientras que en la educación asincrónica no se cuenta con mucha interacción con otros estudiantes o con el profesor.
- La flexibilidad de horario en la educación asincrónica es completa, pues cada persona aprende a su propio ritmo y tiempo; en el caso de la educación sincrónica se requiere disponibilidad de un tiempo específico.
- Mientras que la educación sincrónica se apoya en herramientas como Zoom, Microsoft Teams o Google Meet; la educación asincrónica requiere de plataformas de e-learning como moodle o blackboard.
Aplicación de la educación sincrónica y asincrónica en el marketing digital
Aunque ambos tipos de formación son aptos para capacitarse en marketing digital, es importante tener en cuenta que se debe escoger el modelo educativo basado en las necesidades que se tengan en el momento.
La educación sincrónica en marketing digital permite que los equipos de marketing o estudiantes interactúen en tiempo real con sus compañeros y profesor, dando lugar a la resolución de dudas y participación en el desarrollo de ideas.
El trabajo grupal en marketing digital es fundamental y la colaboración que permite la educación sincrónica facilita lluvia de ideas o discusiones de grupo, generando un impulso en la creatividad colectiva.
Este tipo de pedagogía es ideal para la capacitación de equipos de ventas, pues a través de sesiones en línea se pueden dar pautas de comunicación, recibir retroalimentación y discutir estrategias que optimicen la implementación de cada campaña.
Otro ejemplo para aplicar la educación sincrónica en marketing digital es a través de un webinar en donde se capacite a las personas sobre una nueva herramienta o proceso, aprovechando la conectividad inmediata para despejar dudas en el momento.
Ahora, al hablar de educación asincrónica en marketing digital, podemos evidenciar que su flexibilidad le permite a los equipos de marketing adaptar sus tiempos para acceder al material educativo en su propio horario, además al contar con el material a perpetuidad, pueden revisarlo y profundizar en él cuando necesiten.
Este tipo de aprendizaje es ideal para formar embajadores de marca o influenciadores, pues se puede brindar un curso asincrónico enfocado en los valores de marca, guías de estilo y prácticas recomendadas. De esta manera ellos podrán revisar este material para guiar su contenido en el momento que lo necesiten.
Otra aplicación de la educación asincrónica en marketing digital puede ser a través de la capacitación continúa de personal a través de cursos pregrabados que permitan a los colaboradores actualizar sus conocimientos. Ahora que entiendes las características y diferencias de estos dos tipos de formación, puedes empezar a seleccionar un curso o capacitación que se adapte a tus necesidades y te permita alcanzar tus objetivos con más facilidad.